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Catalina abandona su casa y comienza a vivir con Jessica, en “Sin tetas no hay paraíso”
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Especial 'Supervivientes 2011'
 
Catalina abandona su casa y comienza a vivir con Jessica, en “Sin tetas no hay paraíso”
miércoles, 5 de marzo de 2008 a las 0:48
Redacción / Telecinco

 Tras cumplir la mayoría de edad, Catalina decide abandonar su casa en el capítulo de «Sin tetas no hay paraiso» que Telecinco emite mañana a partir de las 22:15 horas. La hija de Fina se da cuenta poco a poco de que no es tan fácil enfrentarse a la realidad ella sola y se apoya en Jessica para salir adelante. Mientras tanto, Fina y Jesús se sienten culpables por su marcha.

Ramón Langa se pone en la piel de Bernardo, el dueño del apartamento donde se irán a vivir Jessica y Catalina

Bernardo, un antiguo amigo de la madre de Jessica con un carácter difícil y peligroso, abrirá las puertas de su casa a Catalina y Jessica. Sin embargo, el trato agradable que dispensa a las jóvenes no es más que una estrategia para intentar cobrarse el favor.

Ramón Langa destaca por su trabajo como actor de doblaje y es popularmente conocido por ser la voz española del actor norteamericano Bruce Willis. Además, ha participado en las series «Médico de familia», «Periodistas», «Paraíso» y «Éste es mi barrio» y ha intervenido en las películas «Los fantasmas de Goya», «Tiovivo c. 1950», «Carreteras secundarias» y «Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto».

Duque se esconde en Colombia y Cristina busca una oportunidad en el mundo de la interpretación

En el capítulo titulado «Una nueva vida», Duque permanece escondido en Colombia con Morón y Cardona. Tras el fracaso de la operación, los jefes de la banda no confían en él y le someten a una dura prueba para que demuestre que está de su parte.

Mientras tanto, Vanesa y Cristina no saben qué hacer desde que Jessica y los narcotraficantes abandonaron el barrio. La primera se refugiará en el mundo de las drogas, mientras que Cris intenta dar sus primeros pasos en la interpretación.

Además, Torres acude a terapia con el fin de averiguar la causa de sus obsesiones.